lunes, 26 de septiembre de 2011

La Zanfona

Cantando romances de ciego con el Silbo Vulnerado
La primera vez que la tuve entre mis brazos fue en Buenos Aires, en el café Mozart donde estuvimos actuando en 1989, gracias a Sheila Cremaschi que la hizo aparecer como por arte de magia una noche. Convivimos varias semanas pero solo fui capaz de acariciarla. Me fascinaba.
Era todo un ritual ponerla a punto: el algodón puro enrollado, la resina justa en sus cuerdas y la afinación correcta en cada instante, ¡ah! y las cejuelas que se movían como el pensamiento y algunas eran muy saltarinas...
Años después y gracias a Paco Díaz y a La Bazanca, apareció mi compañera, la que me acompañaría ya siempre hasta el punto de que cuando la saco de su funda y me la ajusto a la cadera, somos una.

Grabando el Romance de La Dolores de Calatayud


Y sé que siempre está ahí, a veces desabrida o chirriante, a veces suave y dulce y siempre sugerente, instala un puente para transportarte desde la nada a la eternidad, desde lo mismo a lo mesmo.
Rrrr.... La rueda de la Fortuna
nunca se pudo estar quieta
con vuelta y media que dio
me trajo para estas tierras ....ruuuuu.



La zanfona, detalle de la mano izquierda.

Con mi hija Ana en 2002 grabando Expresiones.es III para Trovideo en casa.
Gracias a algunos amigos y a Jesús Reolid y a Rafa Martín de la Asociación Ibérica de la zanfona aprendí a entorchar el algodón, a afinarla y a disfrutar con su tecladillo. Tanto es el goce que solo puedo cantar al unísono, cerrando los ojos: entonces zanfona, dedos y voz forman una sola rueda y el Conde Olinos, el romance del prisionero o el conde Flores fluyen, salen como el agua de la fuente, de ese manantial maravilloso del que se nutren. 
Incluso Un cabretico o el Enamorado y la Muerte surgen despacio, majestuosos, a su ritmo.
Y una siente que otros seres humanos se enganchan a la rueda y tu propio cuerpo forma parte de la misma, de la rueda de la vida.
¡Que maravilloso instrumento ha pervivido lo largo de tantos siglos!
De la obra "Entremés de las fuentes" sobre El Quijote de El Silbo Vulnerado

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